CAPITULO III
Desde la radiación de la Gran Cintura Electrónica les
proyecto estoy hoy; desde el corazón de la Ciudad de Oro[1] se proyectan los
Rayos Gemelos sobre los cuales están la palabra, la luz y el sonido.
El tiempo nos ha alcanzado rápidamente y debemos estar más
despiertos respecto a los grandes cinturones electrónicos que rodean toda la
creación desde la Deidad hasta el individuo.
La cintura electrónica que rodea la Ciudad de Oro es
impenetrable mucho más que lo que podría ser un muro de acero de muchos pies
de anchura. Así, en un grado menor, el individuo que tiene suficiente
comprensión del principio activo de su Ser Divino, puede rodearse de un círculo
o cintura electrónica, la cual él puede calificar de la manera que se le
antoje, pero ¡ay de aquel individuo que la califique destructivamente! Si
alguno tuviera la temeridad de hacerlo, se encontraría que este cinturón de
fuerza electrónica encerraría su forma exterior y la consumiría; pero aquellos
que construyen y califican con sabiduría, con el amor grande de Dios, y con
poder constructivo, se encontrarán moviéndose en un mundo intocado por la
ignorancia humana.
HA LLEGADO EL PERÍODO CÓSMICO EN QUE AQUELLOS QUE HAN
LOGRADO CIERTO GRADO DE COMPRENSIÓN DEBEN CREAR, APLICAR Y USAR ESTE
MARAVILLOSO CÍRCULO ELECTRÓNICO. Cada creación, que es acción autoconsciente,
tiene este círculo de fuerza electrónica rodeándolo con toda naturalidad, pero
hasta cierto grado su fuerza está descontrolada y, por consiguiente, disipada.
Al crear conscientemente este gran anillo de fuerza
electrónica pura, detienes toda filtración de tu esencia ilimitada y la
mantienes en reserva para uso directo y consciente. Después de unos meses de
esta actividad creadora y consciente dentro de este anillo electrónico hay que
tener mucho cuidado al dirigir esta fuerza. Que no sea en ninguna otra forma
que la del Amor Divino.
En los principios de la individualización del hombre, él
estaba naturalmente rodeado de este círculo mágico; pero a medida que su
conciencia iba descendiendo se hacían rasgaduras en el gran círculo de fuerza,
causando filtraciones, hasta que desapareció. El círculo no fue una creación
consciente del hombre; era un círculo
natural envolvente, por su estado puro de conciencia.
Ahora los estudiantes de la Luz tienen que ponerse a la obra
conscientemente, y sin titubeos crear este Círculo Electrónico en contorno a
sí mismos, visualizándolo perfecto, sin quebraduras en su construcción. Así
será posible conscientemente alcanzar más adentro en la Cintura Electrónica de
la Divinidad, y allí recibir Sabiduría, Amor y Luz sin límites, como también
aprender la aplicación de leyes sencillas por medio de las cuales, todo poder
creador es posible. A pesar de que al estudiante le es recomendado mirar
siempre, sin jamás olvidarlo, hacia su propio Ser Superior, creador de su
individualización, sin embargo, no se ha obtenido un solo logro en el cual no
se haya dado la asistencia de aquellos más adelantados.
Como no hay sino un solo Dios, una sola Presencia y Su
Actividad Todopoderosa, resulta que aquel más adelantado no es sino un poco más
del Ser Divino en Acción. En este reconocimiento vas a comprender por qué es
que puedes sentir «YO SOY aquí y YO SOY allá», puesto que no hay sino un solo
Ser Divino en todas partes.
CUANDO EL ESTUDIANTE POR FIN COMPRENDA QUE LA ASCENDIDA
HUESTE DE MAESTROS NO ES OTRA COSA QUE SU PROPIA CONCIENCIA MÁS ADELANTADA,
ENTONCES VA A SENTIR LAS GRANDES POSIBILIDADES A SU ALCANCE, ASÍ SEA QUE SE
DIRIJA A DIOS DIRECTAMENTE, A UNO DE LOS ASCENDIDOS MAESTROS DE LUZ O A SU
PROPIO «YO SOY». EN REALIDAD NO HAY DIFERENCIA, PORQUE TODOS SON UNO SOLO.
Pero hasta que no se llega a este estado de conciencia sí hay diferencia,
porque el individuo es casi seguro que sentirá una división del Ser Único,
cosa que no es posible sino en la ignorancia de la actividad externa mental.
Cuando el estudiante piensa en esa expresión, exterior, debe
en todo momento recordar que es la actividad externa de la INTELIGENCIA ÚNICA,
guardándose así él mismo contra la división —en su propia conciencia— de este
magno y único poder Divino centrado en él.
De nuevo debo recordarte que este Gran Poder Ilimitado de
Dios no puede introducirse en tu uso exterior sino por virtud de tu propia
invitación. No hay sino una sola clase de invitación que pueda hacer que fluya,
y es tu sentimiento profundo de amor y devoción.
Cuando uno haya generado el Círculo Electrónico en contorno
a sí mismo, no hay otro poder que lo pueda penetrar sino el Amor Divino. Y en
cuanto a penetrar en el Radiante, Candente Círculo de la Deidad, es sólo TU
Conciencia de Amor Divino lo que puede penetrarlo, y a través del cual la
Deidad retoma su Gran Derrame, el cual te llega a través de Mensajeros tan
Trascendentes que sobrepasan en tal forma tu concepto actual, que no es posible
transmitirte en palabras la Majestad del Amor, Sabiduría y Poder de estos
Grandes Seres.
Permíteme recordarte de nuevo que aquel estudiante que «ose
y calle» se encontrará elevado a la radiante trascendencia de esta ESFERA
INTERNA. Y será por medio de su visión y experiencia que logrará comprender
esto que te estoy diciendo. El Alma que posee suficiente fuerza para vestirse
de su armadura de Amor Divino y avanzar, no encontrará obstrucción alguna, pues
no hay nada entre su presente conciencia y esa Esfera de Magna Trascendencia
Interna que obstruya el acercamiento del Amor Divino.
Cuando tú hayas mirado y tocado dentro de este Círculo
Interno, vas a comprender cuan imperfecta es la presente expresión del Amor
Divino. Una vez que uno hace conciencia de estas Grandes Esferas, a las cuales
uno puede llegar, se encuentra sin temor alcanzando más y más profundamente la
radiación interior de ese Gran Eje Inteligente del cual han procedido toda
Creación y todos los mundos.
Hay entre ustedes almas fuertes y valientes, que
comprenderán esto y que pueden usarlo para gran bendición propia y de los
demás. Hay también otros que comprenderán que la Presencia que late en cada
corazón es Dios, que la esencia que surge para vitalizar la forma exterior es
Dios en Acción, que la actividad que hace circular la sangre por todo el cuerpo
es Dios. Entonces, Amado Estudiante, pon atención a lo siguiente: ¿No ves tú
qué gran error es hundirse en la ignorancia del ser exterior y sentir dolor,
molestias, perturbaciones, todo creado por la ignorancia y actividad de ese
ser, cuando unos momentos de meditación te harán realizar que no puede haber
sino una Presencia, una Inteligencia, un Poder que es Dios actuando en la
mente y el cuerpo?
¿Ves tú ahora cuán sencilla, aunque poderosa, es esta
Conciencia dentro de ti, que puede soltar el pleno reconocimiento de la Grande
y Pura Actividad de Dios a la mente y el cuerpo, y que permite que la
maravillosa y trascendente Esencia llene cada célula hasta derramarse?
A mí me parece que tú no puedes menos que captar la
sencillez de tu propio Ser Interno actuando en ti mismo. Vuélvete
constantemente hacia Él. Ámalo, alábalo, ordénale que surja en cada célula del
cuerpo, en cada necesidad de la actividad externa, en el hogar, con los
negocios, etc. Cuando tu deseo se proyecte revestido en la Presencia, Poder e
Inteligencia de Dios, no puede fallar. Tiene que traer aquello que tú necesitas
o deseas, ya que el deseo no es sino una actividad menor que un decreto y el
decreto es el reconocimiento del deseo cumplido. Yo te aseguro que no debes
jamás tener ningún temor respecto al uso de este gran Poder.
Bien lo sabes tú sin que se te diga que si lo usas mal,
generarás inarmonía. Si lo usas constructivamente, te traerá tales bendiciones
que no puedes sino vivir alabando y dando gracias. Este Poder está esperando tu
dirección consciente.
La persona que dijo un día bíblico: «¿Quién de vosotros
puede con el pensamiento añadir un codo a la estatura?», ahogó la actividad y
el progreso individual, ya que el pensamiento y el sentimiento son el Poder
Creador de Dios en Acción.
El uso incontrolado del pensamiento y el sentimiento han
traído toda clase de discordias, enfermedades y molestias. Sin embargo, pocos
son los que creen esto, y continúan creando caos en sus mundos con sus
pensamientos y deseos desordenados cuando podrían, tan fácil como respirar,
tornar a usar su pensamiento constructivo, y con el motivo del Amor,
construirse un paraíso perfecto en un período de dos años.
Hasta la Ciencia ha comprobado que la forma exterior y el
cuerpo interior se renuevan completamente en pocos meses; de manera, pues, que
por medio de la aplicación de las leyes verdaderas del Ser ¡cuán fácil es
causar la perfección del cuerpo exterior entero, y que cada órgano recobre su
actividad normal y perfecta en poco tiempo! Sería imposible que la inarmonía
entrara en el pensamiento o en el cuerpo. Esta es la puerta abierta de Dios
ante ti que ninguno puede cerrar sino tú; que nadie puede obstruir ni interferir.
Usa valientemente tu dominio y poder Divino y sé libre.
No puedes mantener esta libertad perfecta sino por medio
del conocimiento consciente y aplicado. Te voy a dar un secreto, que si fuera
comprendido por el individuo iracundo o discordante lo arrancaría de esa
actividad destructiva, aunque no fuera sino por un motivo puramente egoísta. La
persona iracunda, condenadora, que envía pensamientos y palabras destructivas
hacia otra, recibe de vuelta la cualidad negativa con que cargó sus sentimientos,
palabras y pensamientos. En cambio, la otra, si está estabilizada en su poder
Divino, recibe la energía que le haga falta, calificándola. Así el creador de
discordias a través de su ira y condenación, se está destruyendo él mismo y a
su mundo y asuntos.
He aquí un punto vital que deben comprender los
estudiantes. Cuando uno conscientemente busca alcanzar el Círculo Electrónico
Interior de Dios, hace de su expresión y actividad exterior un canal incesante
para el flujo de la Esencia pura que le viene de la Divinidad. Esto en sí,
aunque él se conserve completamente silencioso, es uno de los más grandes
servicios, conocido por pocos seres que están conscientes de lo que significa
para la humanidad.
Aquel que está tratando de alcanzar el interior del Círculo
Interior electrónico llega a ser un manantial continuo; y la propia radiación
es una bendición para la raza humana.
Así, centuria tras centuria, han habido aquellos altruistas
mensajeros de Dios a través de los cuales es derramada, para la bendición de
los que no comprenden, la Presencia Elevadora de esa energía fluyente. Cuando
se encuentran uno o más que puedan ser un canal para esta gran presencia
acumulada, semeja los primeros goteritos de una filtración en una represa.
A medida que se mantiene firme la conciencia, y a medida
que se aumenta la brecha en la represa, mayor volumen de agua pasa y, al final,
toda obstrucción es eliminada y se proyecta íntegra la fuerza para ser
utilizada.
Al contrario del agua estancada que se desborda,
disipándose porque no tiene dirección, el Poder Divino, así soltado, va
directamente al canal de conciencia más receptivo, y allí se amontona esperando
la oportunidad de manifestarse más y más.
Así, el estudiante de la Luz, aparte de su actividad en
dispensar la Verdad, se convierte, como quien dice, en un pozo artesiano de
cuyas profundidades fluye esta magna esencia de Dios.
LOS ESTUDIANTES DEBEN EN TODO MOMENTO RECORDAR QUE NO
IMPORTA LO QUE HAYAN COMETIDO EN ERRORES. DIOS JAMÁS CRITICA NI CONDENA, SINO
QUE EN CADA TROPIEZO DICE DULCE Y AMOROSAMENTE «LEVÁNTATE, HIJO, Y COMIENZA DE
NUEVO, CONTINÚA ENSAYANDO HASTA QUE LOGRES LA VERDADERA VICTORIA Y LA LIBERTAD
DE TU DOMINIO DIVINO».
Siempre, cuando uno se hace consciente de haber cometido un
error, el primer acto debe ser invocar la Ley del Perdón y pedir fuerza y
sabiduría para no repetir el error una segunda vez. Dios, todo amor, tiene una
infinita paciencia y no importa el número de nuestros errores siempre se puede
decir «elévate y sube al Padre». Tal es el amor y la libertad en que los Hijos
de Dios tienen el privilegio de actuar. No hay sino un solo proceso invencible,
evolucionador y es a través del poder de generar conscientemente el Amor
Divino. El Amor, siendo el eje de toda vida, cuanto más lo usemos conscientemente,
más fácil y rápidamente libraremos el magno Poder de Dios que, como una gran
fuerza acumulada, siempre está esperando una apertura para proyectarse por
nuestra propia conciencia.
Por primera vez en muchas centurias, los faros o rayos de la
Ciudad Dorada, situada en el Plano Etérico sobre el Desierto de Sahara, están
puestos en operación activa sobre América y la Tierra toda. Puede que haya
algunos individuos que puedan ver estos Rayos sin saber lo que significan.
El hombre no puede seguir pensando que puede continuar
generando fuerzas destructivas y seguir sobreviviendo. Aquellos que pueden
esparcir el conocimiento del Círculo Electrónico, ya no deben ser privados de
sus beneficios. Que lo divulguen junto con la alerta.
Usa esta afirmación:
«YO SOY LA ACTIVIDAD CUMPLIDA Y EL PODER SOSTENEDOR DE TODA
COSA CONSTRUCTIVA QUE YO DESEE».
Úsalo como un decreto general, porque el poder sostenedor
está en todo lo que existe. «YO SOY» aquí y «YO SOY» allí, decretado en todo lo
que quieras lograr, es un estupendo decreto para usar la Única Actividad y
para elevarse por encima de la conciencia de separación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario